Adéntrate en el mundo del electroestimulador muscular y descubre cómo usarlo de forma segura para maximizar beneficios y minimizar riesgos. ¡La electroestimulación te aporta muchas ventajas!
Aprende las mejores prácticas para sacar el máximo rendimiento a tu dispositivo.
¡Vamos a ello!
Introducción
Para maximizar los beneficios y minimizar los riesgos de la electroestimulación, es importante acostumbrarse a seguir unas pautas correctas. Esto incluye la elección de un estimulador muscular adecuado para ti y tus objetivos, ajustar la intensidad y la variedad de programas según las necesidades individuales, y realizar el pequeño mantenimiento que recomienda al fabricante (verás que son cosas básicas y sencillas).
Revisemos los puntos más importantes.
Instrucciones generales de uso
Antes de iniciar cualquier sesión de electroestimulación, es fundamental que consultes con un profesional de la salud, especialmente si se tienen condiciones médicas preexistentes.
Una vez obtenida la aprobación médica, el siguiente paso es familiarizarse con el dispositivo leyendo detenidamente el manual de instrucciones. Si, tenemos claro que es una molestia, pero es importante para garantizar no solo la seguridad sino también la eficacia de su uso.
Para que tu electroestimulador muscular se mantenga en las mejores condiciones posibles y dure más, recuerda mantenerlo y guardarlo en las condiciones que recomiende el fabricante. Es recomendable guardarlo en algún tipo de estuche que lo proteja de posibles golpes, acumulación de polvo y evite que la humedad ambiental pueda deteriorar la electrónica o la batería.
Preparación y programación del electroestimulador muscular
Hay que verificar que el estado del electroestimulador sea correcto.
Asegúrate de que todos los componentes, como cables, electrodos, carga de la batería, etc, estén en perfectas condiciones y funcionen correctamente. Por ejemplo, algunas veces, por el uso constante, los cables pueden dañarse y hacer que se pierda la señal, lo que en algunas máquinas corta el programa de inmediato por seguridad.
Selecciona el programa que mejor se adapte a tus necesidades y a tus objetivos de ese momento o periodo. Antes de pasar a programas muy específicos, algunos de estos aparatos tienen programas de iniciación para adaptarte, durante unas pocas semanas.
Muchos dispositivos ofrecen programas preestablecidos para diferentes objetivos, como tonificación, relajación, fuerza, musculación o recuperación. Si prefieres una sesión personalizada, ajusta los parámetros de acuerdo con tus preferencias personales y las recomendaciones del fabricante.
Colocación de electrodos para electroestimulación
La colocación correcta de los electrodos es un factor clave para que los resultados sean los esperados y evitar riesgos. Además la colocación será diferente según la zona muscular, el tamaño de la zona, el tipo de programa que queramos aplicar, y si se trata de un programa de estimulación muscular EMS, TENS, o masaje. En algunos electroestimuladores musculares hay accesorios, como en Compex con su lápiz de punto motor, que te ayuda a encontrar el punto exacto en tu músculo donde colocar el electrodo.
También es importante utilizar un tamaño de electrodo correcto: si hemos de trabajar un músculo o zona muscular grande tendremos que utilizar un electrodo de tamaño grande y si es un músculo más pequeño será suficiente con el electrodo de tamaño pequeño. A veces es conveniente combinar tamaños para una mejor estimulación.
- Colocación en EMS:
- En este caso el electrodo de polaridad positiva se ha de colocar en el punto motor del músculo. La colocación del segundo electrodo dependerá del programa que sigas. Consulta el manual de usuario de tu electroestimulador para hacerlo correctamente.
- El tamaño del electrodo (grande o pequeño) y su ubicación precisa sobre el grupo muscular objetivo son determinantes para la efectividad del tratamiento. El manual te indicará también el tamaño adecuado para el programa que estés siguiendo. Para estimular adecuadamente la mayor cantidad posible de fibras musculares, se deben usar las energías máximas tolerables. Cuanto más intensa es la estimulación, mayor es el número de fibras reclutadas y por tanto mejores los resultados obtenidos. Igual que en un entrenamiento con pesas (por ejemplo), el resultado es proporcional al nivel de intensidad, pero no olvides que nunca hay que empezar al máximo, hay que subir progresivamente para evitar lesiones.
- Hay que tener cuidado con la intensidad de la estimulación, si nos pasamos porque queremos comenzar con una intensidad demasiado fuerte, corremos el riesgo de sufrir lesiones, así que es importante realizar un recorrido gradual en el uso de un EMS, comenzando con intensidades bajas e ir subiendo el nivel a medida que nuestro cuerpo se va acostumbrando.
- Colocación en TENS.
- Como ya comentamos en otro artículo de nuestra web, TENS se usa para aliviar el dolor suprimiendo la transmisión nerviosa del mismo y estimulando la secreción de endorfinas naturales.
- Es aconsejable colocar los electrodos de manera que el punto de dolor quede entre ellos, o poner un electrodo positivo directamente sobre el punto más doloroso y el otro a 2-3 cm de distancia como mínimo. De todos modos, sigue las recomendaciones del manual para la correcta colocación en cada caso.
La electroestimulación muscular (EEM) permite exigir a los músculos un esfuerzo mayor que la actividad voluntaria, con poco estrés cardiovascular o psicológico, y prácticamente sin forzar articulaciones ni tendones. Además, las sesiones EMS no producen fatiga del sistema nervioso central, cosa que sí sucede con entrenamientos tradicionales, lo que nos permitiría un entrenamiento más intenso sin los efectos negativos de la saturación y fatiga del sistema nervioso central o el sobreentrenamiento.
Por otro lado, los programas TENS pueden tener un efecto analgésico, bloqueando la transmisión del dolor o aumentando la producción de endorfinas.
Consejos para una colocación efectiva
- Preparación de la piel: La piel debe estar limpia y seca. Si te habías puesto alguna crema corporal, deberás retirarla para que la transmisión de la corriente sea efectiva. Se puede utilizar un gel para mejorar la conductividad y comodidad durante la sesión.
- Tipo de electrodo: Utiliza el tipo de electrodo adecuado para la zona a tratar. Por ejemplo, electrodos cuadrados para áreas pequeñas y delicadas, rectangulares para zonas más grandes y redondos para áreas curvas como rodillas y hombros.
- Posición correcta: Asegúrate de que los electrodos están colocados en la zona recomendada según el programa que vayas a seguir.
Mantenimiento de los Electrodos
- Limpieza: Después de cada uso, limpia los electrodos con un paño suave y seco.
- Inspección: Revisa regularmente el estado de los electrodos y reemplázalos si muestran signos de desgaste.
- Almacenamiento: Guarda los electrodos en un lugar fresco y seco, lejos de la luz directa del sol.
Durante la sesión de electroestimulación
Comienza siempre con una intensidad baja y aumenta gradualmente hasta alcanzar un nivel que sea cómodo pero efectivo. La duración de la sesión dependerá del programa seleccionado y de los objetivos específicos del momento. Las sesiones deben ser progresivas y cada semana deberías subir la intensidad para lograr tus objetivos.
Ten en cuenta lo siguiente:
Posición del cuerpo
La posición del cuerpo va a depender del tipo de programa y músculo que necesites tratar. En el manual encontrarás una guía sobre cómo colocarte de forma correcta. De todos modos, ponte de la forma más cómoda que puedas dentro de la colocación que te indique el manual, para que puedas estar lo más relajado posible durante la sesión.
Cuando durante el programa se vayan a producir contracciones musculares fuertes, tendrás que asegurarte de que no se mueva tu cuerpo. Por ejemplo, si vas a trabajar los cuádriceps, la posición será sentada, pero tendrás que asegurarte de mantener fijos los tobillos para evitar dar una patada al frente durante una contracción fuerte.
Antes de comenzar la sesión de electroestimulación
- Calentamiento: Realiza un calentamiento ligero antes de colocar los electrodos para preparar los músculos y mejorar la circulación.
- Hidratación: Mantén una buena hidratación antes y después de la sesión para facilitar la conductividad eléctrica y la recuperación muscular.
- Ambiente adecuado: Evita usar el electroestimulador en ambientes húmedos o con alta humedad ambiental para prevenir accidentes.
Revisión de sensaciones
- Nivel de intensidad: Ajusta la intensidad de forma que sientas una contracción muscular firme pero sin llegar al dolor… bueno, esto es lo que dicen todos los fabricantes en sus manuales, pero la verdad es que sí que puede doler si llegas a un nivel alto de intensidad (no has de pasarte, desde luego)… A ver, quién no se cansa con una buena sesión de ejercicio o no le duele después de un día de entrenamiento de piernas?…pues eso.
- Sensaciones anormales: Si experimentas picazón, ardor, un dolor demasiado intenso o cualquier sensación desagradable, detén la sesión y reajusta los electrodos o la intensidad.
Durante la estimulación
- Posición corporal: Mantén una postura cómoda y relajada que no interfiera con la transmisión de los impulsos eléctricos.
- Respiración: Concéntrate en una respiración profunda y regular para promover la relajación y la oxigenación de los músculos.
Control de la sesión
- Tiempo: No excedas el tiempo recomendado por el programa o el fabricante.
- Supervisión: Si es posible, realiza la sesión bajo la supervisión de un profesional o con alguien cerca en caso de necesitar ayuda.
- Es importante no utilizar el electroestimulador en zonas con heridas abiertas o irritaciones en la piel. Además, evita el uso cerca del corazón, la cabeza, y sobre o cerca de zonas cancerosas.
Finalización de la sesión de electroestimulación
- Desconexión gradual: Al finalizar, reduce la intensidad gradualmente antes de apagar el dispositivo.
- Masaje: Considera realizar un masaje suave en el área tratada para favorecer la circulación y la relajación muscular.
Después de la sesión
Una vez finalizada la sesión, apaga el dispositivo y retira los electrodos cuidadosamente.
Limpia los electrodos para mantener la higiene y prolongar la vida útil del equipo.
Uso responsable y consciente del electroestimulador muscular
Es fundamental utilizar el electroestimulador muscular de manera responsable, siendo consciente de las propias limitaciones y necesidades físicas. Sobre todo si tienes alguna situación de salud, asegúrate bien de la conveniencia de usar un electroestimulador.
No debes buscar el dolor como indicativo de efectividad, sino más bien una sensación de trabajo muscular firme pero cómoda.
Riesgos al usar el electroestimulador muscular y cómo evitarlos
La electroestimulación muscular es una técnica segura, pero que conlleva ciertos riesgos si no se utiliza correctamente. Te indicamos a continuación los más comunes y cómo evitarlos.
Rotura fibrilar
- Descripción: La rotura fibrilar es una lesión que puede ocurrir cuando la tensión muscular generada por la electroestimulación es demasiado alta, especialmente si el músculo está en fase excéntrica o negativa (es decir, cuando está trabajando pero en posición alargada)
- Prevención: Para evitarla respeta las indicaciones de progresión lógicos comenzando con una intensidad baja, e incrementarla gradualmente según la tolerancia.
Rabdomiolisis
- Descripción: La rabdomiolisis es una condición grave que resulta de la descomposición excesiva de la fibra muscular, liberando su contenido al torrente sanguíneo a niveles que pueden sobrepasar la capacidad de filtración del riñón.
- Prevención: Para prevenir la rabdomiolisis, es importante no superar la tolerancia del usuario y ajustar la duración e intensidad de la electroestimulación a niveles seguros.
Contraindicaciones de la electroestimulación
Además de los riesgos mencionados, existen contraindicaciones específicas para el uso de electroestimuladores musculares:
- Marcapasos o desfibrilador intracardíaco
- Epilepsia
- Embarazo
- Hernias y diástasis abdominal
- Patologías cardíacas
- Trombosis y obstrucción arterial
Podrás encontrar un artículo completo dedicado a las contraindicaciones en nuestra web. Es este.
Calidad del electroestimulador muscular
Como muchos de los productos que se comercializan en la Unión Europea, los electroestimuladores musculares deben cumplir con una serie de normas.
Estos aparatos están dentro de la categoría de “producto sanitario” y se encuentran regulados por el reglamento (UE) 2017/745. La finalidad de este reglamento es asegurar la calidad y seguridad de los productos sanitarios y la protección de los usuarios. Los productos englobados en este reglamento y que lo cumplen van marcados con la marca CE que podemos encontrar en muchos aparatos.
El marcado CE se incluye en aparatos incluidos en otras reglamentaciones. La colocación de dicho símbolo indica que ese instrumento cumple las normas particulares de su categoría.
Por propia seguridad, es recomendable que utilices un electroestimulador muscular que cumpla este reglamento.
Conclusión
Hay numerosos estudios que demuestran la gran utilidad de la electroestimulación muscular para mejorar el rendimiento atlético, la recuperación y la rehabilitación. Pero el uso de los electroestimuladores musculares requiere precaución y conocimiento de las instrucciones de uso para la seguridad.
Al principio puede que te parezca que has de tener en cuenta demasiadas cosas, pero es solo cuestión de “pillarle el punto”. Una vez conoces el aparato, y ves todo lo bueno que puede hacer por tí, verás que vale la pena.
Te lo decimos por experiencia propia, ¡somos fans!.
Fuentes
- Manual Compex
- Manual Beurer
- REGLAMENTO (UE) 2017/ 745 DEL PARLAMENTO EUROPEO Y DEL CONSEJO
Descargo de responsabilidad:
Este artículo tiene como objetivo promover la comprensión y el conocimiento sobre los electroestimuladores musculares y ser una ayuda para escoger el más adecuado. No está destinado a servir como consejo de salud profesional y no está destinado a ser utilizado para el tratamiento de ninguna condición o síntoma. Debes seguir los consejos de tu médico o fisioterapeuta si tienes alguna pregunta sobre una afección o tratamiento.
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¿Qué son los electroestimuladores musculares?
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